Hacer más con menos parece ser una frase conocida con la que en algún momento de nuestras vidas nos hemos encontrado, tanto en el plano personal como el profesional y laboral. Pero, ¿alguna vez has escuchado el término innovación frugal?

La innovación frugal está basada en lo esencial: hacer más con menos, o hacerlo de una mejor forma para así impactar a más personas. Los objetivos de la innovación frugal son crear productos y servicios accesibles en precio, fáciles de conseguir y que logren solucionar una necesidad real y valorada por las personas.

Lina María Pérez Duque, egresada UAO del programa de Contaduría Pública del año 2018 y de la maestría en Administración de Empresas del año 2022, Y Directora del Centro de Innovación y Emprendimiento, Sinapsis UAO, nos quiere compartir un artículo que escribió en junto a Lina Abaunza Barón, actual directora Ejecutiva de la Fundación Acción Cultural Popular, en donde habla de lo que es la innovación frugal:

Los primeros registros sobre el concepto de innovación frugal aparecen a finales de la primera década del siglo XXI, provenientes de comunidades de negocios. Concepto que empieza a ser considerado desde la literatura académica a partir del año 2010, dado el éxito de soluciones innovadoras y creativas originadas en la India (Perez & Balbinot, 2019). Actualmente, su comprensión y aplicación proviene de varias disciplinas tales como la economía del desarrollo, la ingeniería de productos y procesos, la sustentabilidad, la estrategia empresarial y desde el campo de la psicología y la pedagogía, tomando la teoría constructivista de Jean Piaget.

La innovación frugal está basada en lo esencial: hacer más con menos, hacerlo de una mejor forma e impactar a más personas. De esta manera, los escenarios donde prime la escasez de recursos, la urgencia de solucionar un problema, en los que además se requiera hacer optimización y reducción de costos ambientales y económicos, son ideales para su desarrollo.

El término frugal se utiliza para designar innovaciones que generan productos y servicios a bajo costo. De lo que se deriva el mayor impacto factible y, a su vez, el mayor número de recursos locales y aprovechamiento de las costumbres, bien sea a nivel de cultura organizacional o conocimientos ancestrales del territorio. Así, la innovación frugal comprende y adapta tanta creatividad como se pueda, se basa en pensamiento flexible y nace gracias a la resiliencia que tiene una organización, comunidad o territorio.

Para lograr una innovación frugal se debe partir desde el resultado esperado, por eso se llama también innovación inversa, con el fin de identificar los factores susceptibles al cambio y, de esta manera, dar la solución a la necesidad, impactando al mayor número de personas posibles.

Características de la innovación frugal

La innovación frugal, de acuerdo con Radjou & Prabhu (2014) se basa en tres pilares: la frugalidad de los medios empleados, la flexibilidad en la manera de pensar y actuar y, por último, la posibilidad de ser un proceso colaborativo entre personas dentro y fuera de la comunidad u organización en la que se realiza la innovación.

Sus objetivos son crear productos y servicios accesibles en precio, fáciles de conseguir y que logren solucionar una necesidad real y valorada por las personas.

Gracias a la innovación frugal también se puede llegar a algunas conclusiones: primero, que se debe simplificar, es decir que no se deben proponer soluciones para impresionar a los clientes, hay que hacer cosas fáciles de usar, incluso de forma intuitiva, y ampliamente accesibles. Segundo, que no se debe reinventar la rueda, hay que aprovechar la amplia disponibilidad de los recursos existentes. Tercero, hay que pensar y actuar de forma horizontal; Las empresas tienden a escalar verticalmente, centralizando operaciones en fábricas y almacenes, pero para ser ágiles y hacer frente a la inmensa diversidad de clientes deben escalar horizontalmente por medio de una cadena de suministro distribuida con unidades de fabricación y distribución más pequeñas.

Así pues, estudios realizados por Weyrauch & Herstatt (2016), quienes hicieron entrevistas con profesionales y empresarios que emplean innovación frugal, determinaron que esta tiene nueve características: funcional y centrado en lo esencial, el costo inicial es considerablemente más bajo que el precio de compra, reducir el costo total de propiedad, minimizar el uso de material y recursos financieros, amigable y fácil de usar, robusto, de alto valor y calidad, escalable y con ventas en grandes cantidades y sostenible.

Casos de innovación frugal en Latinoamérica

Un ejemplo de esta clase de innovación es la Orquesta de Instrumentos Reciclados de Cateura. Ellos fabricaron instrumentos a partir de residuos sólidos domiciliarios del vertedero Cateura, Paraguay. Crearon violines, violas, cellos, contrabajos, guitarras, flautas, saxofones, trompetas y percusiones.

Esta iniciativa nació por la necesidad de formar a través de la música a niños y jóvenes de la comunidad, en condiciones de vulnerabilidad y exclusión social. Esta propuesta impactó de manera positiva a las 600 familias cuyas cabezas trabajan en el vertedero de dicha comunidad, la cual se beneficia de la oportunidad brindada a sus hijos de ser parte activa de la orquesta. A su vez, esto les permite proyectar su porvenir hacia mejores condiciones por medio de la música.

Otra referencia es Litro de Luz, una organización colombiana sin ánimo de lucro que trabaja de la mano con A Liter Of Light, en Filipinas, que lleva luz a los lugares menos favorecidos y a las comunidades más vulnerables del mundo. Esto se hace con iluminación autosostenible a partir del reciclaje de botellas plásticas de gaseosa que se llenan con agua pura y cloro y son instaladas en los tejados, permitiendo a las familias iluminar sus espacios de una manera natural y autosostenible.

Esto tiene una vida útil de 10 años sin cargos de mantenimiento y sin pagos de facturas. Hasta el momento se han beneficiado 237.100 personas en ocho países. Actualmente se está trabajando en pro de mejorar el diseño de los postes de tercera generación Eliot, con el fin de llevar la iluminación a espacios abiertos y de dispersión de dichas comunidades. 

Qinaya Colombia es un referente adicional. Se trata de una aplicación de virtualización que permite acceder a un computador completamente funcional desde cualquier dispositivo con posibilidad de usar todas sus funciones, lo que permite a las personas de escasos recursos acceder desde los televisores de sus casas o teléfonos celulares a esta solución.

La finalidad de los creadores es cerrar la brecha digital que actualmente tiene Latinoamérica, ya que el 64% de las familias no tiene un computador. Hasta el momento, alrededor de 5.000 personas se han beneficiado.