La que hoy conocemos como Universidad Autónoma de Occidente, en 1985 llevaba por nombre Institución Corporación Universitaria Autónoma de Occidente, y en la celebración de su quinceavo aniversario, se pensó en la manera de retribuir el apoyo que le había brindado la comunidad, dejando como resultado la creación de un proyecto social que aportaría a las comunidades más vulnerables de la ciudad.

En 1986, se inició con el programa ‘Proyecto Aguablanca’, siendo desde entonces la comunidad de El Poblado II la de mayor respaldo para desarrollar las actividades planeadas de forma óptima. Como evidencia de esto, en 1991 se inauguró la sede operativa de El Poblado II, que abrió las puertas para que, como fruto del trabajo, en el 2000 se constituyera formalmente Fundautónoma, con Personería Jurídica.

Desde entonces, la Fundación tiene como parte de sus objetivos promover la tolerancia, el respeto y el fortalecimiento de las relaciones interpersonales, mediante actividades lúdicas, recreativas y pedagógicas, a partir del reconocimiento del ser individual y social, con las personas de las comunas 13, 14 y 15 del oriente de Cali, con unos aliados clave como lo son: la Arquidiócesis de Cali, la Secretaria de Bienestar Social de la Alcaldía de Santiago de Cali y el Banco de Alimentos.

Estas experiencias han permitido reconocer, no solo los flagelos que aquejan a esta comunidad, sino vivirlos, ya que el espacio de trabajo está ubicado dentro de la comunidad, lo que ha permitido emprender acciones asertivas, entre ellas:

Comedor Comunitario

Reconoce la alimentación como derecho fundamental. Con ayuda de los aliados, se creó el Comedor Alimentando Sonrisas, para brindarle un espacio de alimentación sana a la comunidad.

Social Lab

Un proyecto donde jóvenes de la comuna 13, de la mano con estudiantes, docentes y directivos de la UAO, crearon diversos proyectos que permiten innovar en escenarios dentro de la comunidad, con temáticas como el arte y la tecnología, la reactivación de espacios y el medio ambiente.

Guiados por nuestro plan estratégico 2030, tenemos unos objetivos muy claros en función de la comunidad y del fortalecimiento del tejido social. Queremos impactar más dentro de la comunidad y dentro de la Universidad.
Claudia Uribe, directora de Fundautónoma

Uno de los grandes cambios es que anteriormente se gestionaban recursos para proyectos de terceros, en este momento se le apuesta a los proyectos propios.

Ese es el giro que ha dado la Fundación, ya no es un espacio donde llegan otras entidades para desarrollar el proyecto, ahora somos nosotros quienes vamos a invitar a esas entidades a acompañar nuestros proyectos
Claudia Uribe

Fundautónoma ha estado 34 años presente en la formación de muchas personas de la comunidad de ‘Agua Blanca’, entre ellas Mayerli Solís, quien después de hacer parte de los talleres de liderazgo de jóvenes, lleva ocho años trabajando en la Institución y asegura que la Fundación influye de manera positiva en el oriente de la ciudad.

Aquí las personas salen a rebuscar un sustento para llevar a sus hogares, pero también se notan las ganas de seguir. Ver cómo con la presencia de Fundautónoma ha cambiado su estilo de vida, que los niños ya no tienen el imaginario de no ir a la Fundación por las fronteras invisibles, sino que ya pueden salir con tranquilidad en estos espacios y caminar sin temor, eso ha sido lo más gratificante”.
Mayerli Solís