El proyecto Gritar lo que callamos, elaborado por los estudiantes Santiago Bedoya, del programa de Cine, y Antonia Ovalle, del programa de Comunicación Social – Periodismo, con el apoyo de la organización social Juntanza Popular, obtuvo el estímulo del Ministerio de Cultura, llamado Jóvenes por el Cambio.

Con esta convocatoria, el Ministerio de Cultura busca contribuir al desarrollo de la libertad creativa, establecer y reforzar vínculos comunitarios mediante propuestas que involucran el trabajo colaborativo entre jóvenes, y reconocer su diversidad desde todas las dimensiones.

“Recibir este estímulo es el reconocimiento a un arduo trabajo que se ha hecho con los lídereses y lideresas de los barrios, con los artistas, víctimas y señoras de la olla, entre otros. Significa la posibilidad de poder tocar temas que me apasionan y que son importantes para la sociedad. Además, es un logro a nivel profesional significativo, ya que estoy a punto de graduarme de mi carrera”, comenta Santiago.

La propuesta fue presentada en un video que debía tener una duración máxima de cinco minutos, en el que se explicó en que consistió el proyecto, el contexto en el que se desarrolló, en qué se invertirían los fondos y cómo se vincularía o impactaría a la comunidad con la iniciativa.

Gritar lo que callamos es uno de los productos que hacen parte del proyecto transmedia El Gran Estallido: Cali, la sucursal de la resistencia, y consiste en la elaboración de ocho postales que den cuenta de la transformación simbólica del territorio en Cali, a raíz de la explosión artística que se dio en la ciudad con el estallido social del 2021.

El objetivo del proyecto es visibilizar el papel político fundamental de los símbolos como eje de reivindicación social y memoria colectiva, que transforma el espacio público de la ciudad. También pretende ser un aporte a la memoria colectiva, generando una reflexión acerca del espacio público y los discursos que en él habitan.

Se espera que en un futuro se pueda realizar una muestra del proyecto ante la comunidad, además, según indica Antonia “queremos seguir puliendo el trabajo y enviarlo a más convocatorias. Con el estímulo que obtuvimos queremos contratar a alguien para que nos ayude a realizar el cabezote del pódcast, cubrir transporte, alimentación entre otras cosas que hacen que el equipo se disfrute mucho más la elaboración del proyecto”.

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